He vuelto a salir de la oscuridad de mis sábanas tras un resfriado debido a estos cambios de tiempo, cuatro días de los que me he alimentado de la poca luz que ha podído colarse entre las cortinas de ante color berenjena que cuelgan de los ventanales de mi habitación.....una mesilla de noche llena de tissúes y kleenex acompañados de cajas de medicamentos y jarabes para la tos, y ahí, en la otra mesilla, un paquete de tabaco del que por una vez en cuatro días he podído separarme de él pero con cierta añoranza.....
Un día pensé en la oscuridad y en su silencio, en el miedo que puede ofrecernos y el poco daño que finalmente nos dá, regalándonos atísbos de paz, de tranquilidad y la oportunidad de escuchar como pocas veces el sonido del silencio, un tic tac de un reloj a lo lejos, el viento exterior o sin ir más lejos la respiración de nuestra vida....todo tan sumamente insignificante e inocente pero que en la oscuridad esos sonidos se vuelven terroríficos y entramos en estado de miedo...nos da miedo lo oscuro y lo negro... pero no todos esos colores son malos porque sino...¿por qué nos embutímos en trajes negros? ¿quizá para aparentar dos kilos menos?, al fin y al cabo cuando llegamos a casa y nos lo quitámos seguimos pesando lo mismo al igual que si encendémos las luces o corremos las cortinas con la oscuridad nos damos cuenta que esos sonidos son exactamente iguales pero con otro color.....
Y los otros tres días pensé en aquello que nos hace tener ese cosquilleo en el estómago, que nos hace sonreir, llorar, reir, soñar, sentir, vibrar....EL AMOR, ese sentimiento tan agridulce que nos hace tan feliz tantas veces y morir de dolor otras tantas....pero en definitiva un sentimiento puro que nos nace desde lo más dentro, un sentimiento tan fuerte que es capaz de que logrémos hacer locuras....un sentimiento por el que muchas veces nuestro corazón llora en silencio y deseamos volver a oir su voz....
Muchos amores vienen, otros se van, otros nacen y otros cuantos desparecen pero siempre hay uno para nosotros, y si el que tenemos se aleja es porque el destino nos tiene preparado algo mejor.
¿Alguna vez alguien te llamó sólo para decirte te quiero?, ¿así sin más?, es una sensación parecída a cuando te dan un abrazo por la calle envolviendo todo tu cuerpo sintiendo ese calor tan profundo y tan puro que llena hasta el último resquicio de tu piel...
El amor te inunda, te alimenta y sufres con él pero jamás quieres separarte de ese sentimiento...también dicen que los amores no correspondidos son los más sufridos....y así es el amor, sólo nos damos cuenta que ha entrado en nuestra vida cuando damos a esa persona todo lo que a nosotros nos falta, sin importarnos absolutamente nada, el amor crece día a día, se siembra a cada minuto y se disfruta cada segundo y lo echamos en falta a cada instante siendo capaces de olvidarnos de nuestra dignidad sin pensar que también, el amor como tantas cosas podemos perderlo en un abrir y cerrar de ojos....El amor es para disfrutarlo, vivirlo, sentirlo, cuidarlo, valorarlo y sufrirlo, el secreto del amor: hacer
sentirse especial y diferente a esa persona día a día pero sin olvidarnos que como personas que somos debémos valorarnos así mismos y al igual que lo
damos tenemos derecho a recibirlo....
Con Cariño Sairo
